Miércoles, 9 de Agosto de 2006
En el magnífico entorno del cañón del río Ebro, y junto al emblemático río que diera nombre a toda Iberia, El Espíritu de Lúgubre inició el concierto a las 9 de la noche, rodeados por el calor de un público agradecido y espectante, que disfrutó de las canciones y las pequeñas historias que fueron contadas. Y lo mejor de todo: el Vals del tumbamozas fue bailado por casi todos los allí presentes...
Aquí tienes un resumen del concierto en imágenes. Pulsa en ellas para verlas ampliadas.